CUBA
Por Percy Francisco Alvarado Godoy
El pasado 3 de marzo, varios contrarrevolucionarios se reunieron en el domicilio de Antonio Rodiles, ubicado en el Municipio habanero de Playa, y que sirve de sede al provocador proyecto Estado de SATS, bajo la venia del jefe adjunto de la Sección de Intereses de los Estados Unidos en la Habana, Charles Barclay, supuestamente para desarrollar un intercambio cultural. En dicho encuentro estuvieron presentes, entre otros, el anfitrión, Alexis Jardines, Julio Aleaga Pesant, Miriam Celaya y Yoani Sánchez. No faltó, casualmente en ese convivio, el médico Jeovany Vega, quien sentado en una de las filas intermedias, tomó la palabra durante unos minutos.
Posteriormente, se vio a Jeovany conversar unos minutos con Charles Barclay.
El evento sirvió de marco no solo para que el aprendiz de procónsul de la SINA tanteara el estado de opinión de más de una decena de sus mercenarios, sino para establecer una línea de acción ideológica anticubana, sustentada en la diatriba y la provocación. Como se dice vulgarmente, allí se cocinó el ajiaco de mentiras a desarrollar, huelgas de hambre y protestas a "fabricar" y todo tipo de shows a poner en marcha antes de la llegada del Papa a Cuba. Por supuesto, cada vedette conoció qué papel le estaría asignado en la venidera mascarada.
Jeovany Vega, apenas unas horas después de este encuentro, montó su show mediático, tal como le había orientado su patrocinador de la SINA, nada menos que mediante una cuestionable huelga de hambre -devenida en manido recurso de presión-, so pretexto de reclamar al gobierno cubano que le sea restituida su licencia como médico, así como otras peticiones adicionales.
La maniobra estaba, como señalé anteriormente, cocinada de antemano. Presto y sin perder tiempo, Jeovany envió un documento al MINSAP y, sin esperar respuesta, divulgó por todos medios posibles el inicio de su cacareada huelga de hambre, precisamente en las inmediaciones del parque José Martí, en Guanajay.
Trágico y como un pésimo actor de telenovela barata, Jeovany declaró a Radio Martí: ?Mi vida está en manos del ministro de Salud Pública que tiene en estos momentos la última palabra. El ministro de Salud Pública es el que decide en estos momentos que va a suceder con mi vida, eso las autoridades cubanas lo tienen que tener claro, lo tiene que tener claro el Ministerio de Salud Pública, le di todas las oportunidades que no se merecieron?.
No faltó quien saliera presuroso a apalancar el dudoso reclamo de Jeovany. El mentiroso de oficio, Darsi Ferrer, trató de hacerle la pala al espectáculo cocinado entre Vega Y Barcklay, siempre presto a sacar una buena tajada de su rol de secundón en este show.
Ahora, mientras Barcklay desayuna, almuerza y cena opíparamente, Jeovany cumple "a medias" su huelga de hambre y levanta toda una polvareda mediática entre los mafiosos de Miami y de la casi desahuciada Europa.
Si algunos de mis lectores tienen dudas, simplemente pregúntense: ¿Qué hacia Jeovany en ese encuentro con Barcklay y por qué, 48 horas después, comenzó el montaje de su huelga de hambre? ¿Por qué Radio Martí, financiada por el gobierno norteamericano, ha divulgado esta patraña montada por uno de sus representantes en la Habana?
Como vemos, todo puede esperarse en las viñas del Señor.
La Habana, 15 de marzo de 2012
Por Percy Francisco Alvarado Godoy
El pasado 3 de marzo, varios contrarrevolucionarios se reunieron en el domicilio de Antonio Rodiles, ubicado en el Municipio habanero de Playa, y que sirve de sede al provocador proyecto Estado de SATS, bajo la venia del jefe adjunto de la Sección de Intereses de los Estados Unidos en la Habana, Charles Barclay, supuestamente para desarrollar un intercambio cultural. En dicho encuentro estuvieron presentes, entre otros, el anfitrión, Alexis Jardines, Julio Aleaga Pesant, Miriam Celaya y Yoani Sánchez. No faltó, casualmente en ese convivio, el médico Jeovany Vega, quien sentado en una de las filas intermedias, tomó la palabra durante unos minutos.
Posteriormente, se vio a Jeovany conversar unos minutos con Charles Barclay.
El evento sirvió de marco no solo para que el aprendiz de procónsul de la SINA tanteara el estado de opinión de más de una decena de sus mercenarios, sino para establecer una línea de acción ideológica anticubana, sustentada en la diatriba y la provocación. Como se dice vulgarmente, allí se cocinó el ajiaco de mentiras a desarrollar, huelgas de hambre y protestas a "fabricar" y todo tipo de shows a poner en marcha antes de la llegada del Papa a Cuba. Por supuesto, cada vedette conoció qué papel le estaría asignado en la venidera mascarada.
Jeovany Vega, apenas unas horas después de este encuentro, montó su show mediático, tal como le había orientado su patrocinador de la SINA, nada menos que mediante una cuestionable huelga de hambre -devenida en manido recurso de presión-, so pretexto de reclamar al gobierno cubano que le sea restituida su licencia como médico, así como otras peticiones adicionales.
La maniobra estaba, como señalé anteriormente, cocinada de antemano. Presto y sin perder tiempo, Jeovany envió un documento al MINSAP y, sin esperar respuesta, divulgó por todos medios posibles el inicio de su cacareada huelga de hambre, precisamente en las inmediaciones del parque José Martí, en Guanajay.
Trágico y como un pésimo actor de telenovela barata, Jeovany declaró a Radio Martí: ?Mi vida está en manos del ministro de Salud Pública que tiene en estos momentos la última palabra. El ministro de Salud Pública es el que decide en estos momentos que va a suceder con mi vida, eso las autoridades cubanas lo tienen que tener claro, lo tiene que tener claro el Ministerio de Salud Pública, le di todas las oportunidades que no se merecieron?.
No faltó quien saliera presuroso a apalancar el dudoso reclamo de Jeovany. El mentiroso de oficio, Darsi Ferrer, trató de hacerle la pala al espectáculo cocinado entre Vega Y Barcklay, siempre presto a sacar una buena tajada de su rol de secundón en este show.
Ahora, mientras Barcklay desayuna, almuerza y cena opíparamente, Jeovany cumple "a medias" su huelga de hambre y levanta toda una polvareda mediática entre los mafiosos de Miami y de la casi desahuciada Europa.
Si algunos de mis lectores tienen dudas, simplemente pregúntense: ¿Qué hacia Jeovany en ese encuentro con Barcklay y por qué, 48 horas después, comenzó el montaje de su huelga de hambre? ¿Por qué Radio Martí, financiada por el gobierno norteamericano, ha divulgado esta patraña montada por uno de sus representantes en la Habana?
Como vemos, todo puede esperarse en las viñas del Señor.
La Habana, 15 de marzo de 2012
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