Llanos informó para ‘La Razón Digital’ que: “la víctima, que actualmente tiene doce años, está embarazada de dos meses y en estos momentos se encuentra bajo tratamiento psicológico. Los presos serán internados en los centros de Chonchocoro, Calahumana y en otras instituciones habilitadas en Patacamaya y Sica Sica”.
Según la televisión boliviana ATB: “el padre, el tío y el padrino de la niña abusaron sexualmente de ella durante cinco años. Al menos 250 menores viven en el penal de San Pedro junto a sus progenitores”.
Llanos agregó: “Nadie más ingresará en San Pedro (…) No entrará nadie más, desde tal día, por ejemplo, desde el 17 de julio. Ese día cerraremos el penal y voy a pedir a las Fuerzas Armadas que esos días lleven a cabo un control”.
El comandante general de la Policía, el general Alberto Aracena, solicitó al director de Seguridad de la cárcel de San Pedro “un informe detallado sobre el caso para tomar acciones inmediatas ante el peligro al que están expuestos los menores”.
“Como policía no me lavaré las manos y por este motivo he pedido los informes para ver hasta qué punto este caso tiene que ver con el tema seguridad en la cárcel”.
“Este caso fue descubierto gracias a un trabajo multidisciplinario llevado a cabo en los recintos penitenciarios como parte de las reformas en el sistema”.
El diputado de Convergencia Nacional (CN) Tomás Monasterio planteó una ley que ‘incorpore la castración química de quienes cometan el delito de violación en el país en el Código Penal’.
El diputado del Movimiento Al Socialismo (MAS) Franklin Garvizú apoyó la medida, alegando que: “ya es tiempo de que la Asamblea Legislativa debata este tema y busque un castigo ejemplar para los violadores”.
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