Cerca de 5000 personas cortaron las principales avenidas de la ciudad, y provocaron destrozos en teléfonos públicos, ventanas de locales comerciales, bancos y estaciones del metro. Mientras que dos colectivos fueron incendiados.
La policía reprimió con gases lacrimógenos y balas de goma, mientras que los manifestantes lanzaron bombas molotov a los oficiales.
La avenida Paulista estuvo interrumpida hasta las 23 horas y el tránsito fue un caos.
Las manifestaciones se dieron tras el aumento del 7% del boleto de autobús, metro y tren. “Creo que fue el día más violento por la intensidad y los ánimos de los manifestantes”, afirmó el teniente coronel Marcelo Pignatari de la Policía Militar.