miércoles, 19 de junio de 2013

Manifestaciones de los indignados brasileños se extienden a todo el país.

BRASIL




Al menos 100.000 personas marcharon en la noche de este lunes por la principal avenida del centro de Río de Janeiro y unas 65.000 lo hicieron por diferentes avenidas de Sao Paulo, en manifestaciones que se repitieron en ciudades como Brasilia, Belo Horizonte, Porto Alegre, Salvador, Belén, Vitoria y Curitiba, entre otras grandes capitales regionales.

cacerolazo en brasil
 

 Brasil, 17 de junio de 2013 (Aporrea)

brasilcontraboleto

Las manifestaciones que comenzaron la semana pasada en Sao Paulo contra el reajuste de las tarifas de transporte público se extendieron hoy a al menos veinte ciudades del país, con reivindicaciones cada vez más variadas y un número de "indignados" varias veces superior en las calles.
Al menos 100.000 personas marcharon en la noche de este lunes por la principal avenida del centro de Río de Janeiro y unas 65.000 lo hicieron por diferentes avenidas de Sao Paulo, en manifestaciones que se repitieron en ciudades como Brasilia, Belo Horizonte, Porto Alegre, Salvador, Belén, Vitoria y Curitiba, entre otras grandes capitales regionales.
Las autoridades habían ordenado a la Policía que no reprimiera a los manifestantes para evitar batallas campales con numerosos heridos y detenidos como la del pasado jueves en Sao Paulo, pero eso no impidió algunos incidentes, llevados a cabo por grupos aislados.
En Río de Janeiro un pequeño grupo de encapuchados atacó con cocteles molotov la sede de la Asamblea Legislativa regional, frente a la que incendió un vehículo; y en Porto Alegre la Policía tuvo que dispersar con bombas de gas lacrimógeno a manifestantes que le prendieron fuego a recipientes de basuras y que se enfrentaron con piedras a los uniformados.
En Brasilia cientos de manifestantes aprovecharon la pasividad de la Policía para ocupar temporalmente las rampas de acceso y el tejado del Congreso.
Las manifestaciones fueron convocadas por las redes sociales por un movimiento amorfo, sin líderes aparentes, que dice no representar a ningún partido ni organización política, pese a que en algunas de las protestas era posible ver las banderas de formaciones de izquierda.
El detonante de las protestas fue la subida de veinte centavos de real (unos diez centavos de dólar) de los pasajes de autobús en Sao Paulo.
Pero las manifestaciones inicialmente convocadas por el Movimiento Pase Libre, una organización de estudiantes que defiende el transporte público gratuito, fueron ganando otras reivindicaciones en cada ciudad hasta transformarse en reclamaciones sobre la situación general del país.
"El objetivo de la protesta ha ido más allá de 20 centavos (de real). Es contra la corrupción, contra toda la suciedad de Brasil", dijo a Efe Jacqueline Borges Reis, una estudiante de 22 años que participó en la manifestación de este lunes en Sao Paulo.
En Brasilia, por ejemplo, las protestas están dirigidas principalmente contra las costosas inversiones realizadas por el Gobierno para organizar eventos deportivos internacionales, como la Copa Confederaciones, disputada desde el pasado sábado por ocho selecciones, y el Mundial de fútbol del próximo año.
"El Gobierno gasta miles de millones en estadios y deja de lado la salud", alegó a Efe Raúl Mello, de 22 años, un estudiante de la Universidad de Sao Paulo.
Brasil, uno de los países que más avanzó en la última década en la reducción de la pobreza y en el que la clase media pasó a ser mayoritaria, registra hoy uno de los menores índices de desempleo en su historia y continúa creciendo, aunque a un ritmo bajo, pese a la crisis económica internacional.
Esos avances no han impedido que los brasileños consideren que los servicios públicos, principalmente salud y educación, dejan mucho que desear.
Los ya llamados "indignados" brasileños exigen principalmente mejores servicios públicos y mayores inversiones en educación, salud y saneamiento, así como combate a la corrupción y al despilfarro de recursos públicos.
La mayor concentración este lunes se registró en Río de Janeiro, en donde unas cien mil personas, según algunos cálculos, tomaron de forma pacífica el centro de la ciudad y exhibieron en carteles consignas como "¡Vamos a la calle!" y "Brasil se despertó".
Aunque algunos de los manifestantes en Río portaban símbolos de partidos políticos, la gran mayoría levantó banderas de Brasil, además de flores contra la violencia y narices de payaso contra "la hipocresía".
La presidenta del país, Dilma Rousseff, según un vocero oficial, calificó las manifestaciones como "legítimas y propias de la democracia", así como algo "propio de los jóvenes".
En tanto, el secretario general de la Presidencia, Gilberto Carvalho, anunció que el Gobierno quiere dialogar con los organizadores de las protestas para conocer las "reivindicaciones importantes" que han llevado a tantas personas a manifestarse.

Dilma Rousseff, presidenta de Brasil dijo hoy desde el Palacio presidencial que, “las voces de la calle deben ser escuchadas y que éstas piden el fin de la corrupción”, al comentar las protestas que la víspera llevaron a más de 250.000 personas a las calles de las principales ciudades del país.

Dilma-Rousseff-hablo-por-las-manifestaciones-

“Mi gobierno está escuchando esas voces por el cambio. Mi gobierno está empeñado y comprometido con la transformación social”.
“Más allá de servicios de calidad, los brasileños quieren un basta a la corrupción: Este mensaje directo de las calles es de repudio a la corrupción y al uso indebido del dinero público”.
Rousseff elogió la participación de los ciudadanos en busca de sus derechos, y, afirmó, “mi generación sabe cuánto eso nos costó”.
“Los que fueron ayer a las calles dieron un mensaje directo al conjunto de la sociedad, sobre todo a los gobernantes de todas las instancias: por más ciudadanía, mejores escuelas, hospitales, así como un transporte público de calidad y a precio justo”.
Además elogió ‘el carácter pacífico de las manifestaciones que llevaron a 100.000 personas a las calles de Río de Janeiro y 65.000 a las de Sao Paulo, como también la acción policial sin reprimir la libre manifestación popular,  pero condenó a los que consideró ‘actos minoritarios y aislados de violencia’.
Las que se consideran las mayores protestas callejeras de los últimos veinte años en Brasil llevaron a los brasileños a las calles contra los aumentos de las tarifas del transporte público, y en repudio a los millonarios gastos de la Copa FiFA Confederaciones inaugurada el sábado y el Mundial 2014, que aseguran tendrían que destinarse a mejor salud y educación.
Rousseff dijo que: “Brasil, donde 40 millones de personas ingresaron a la clase media en la última década, con mejoras en los ingresos, el empleo y la educación, tiene ahora ciudadanos que quieren más y tienen derecho a más”.
Los manifestantes no se identificaron con grupos políticos y criticaron  la corrupción política en Brasil.
El aumento de los boletos de los transportes está siendo anulado en la mayoría de los estados del país.

Más de 200.000 personas protestaron el lunes en las principales ciudades de Brasil contra los multimillonarios gastos del Mundial-2014, incluido en Rio de Janeiro, una de las sedes de la Copa Confederaciones, donde hubo escenas de caos con saqueos, vandalismo y enfrentamientos con la policía.

brasil-violencia-por-gastos-del-mundial-de-futbol-

Un pequeño grupo de manifestantes intentó invadir la Asamblea Legislativa de Rio, en el centro de la ciudad.
Tiraron fuegos artificiales, cócteles molotov y piedras contra policías militares apostados en el edificio, constató la AFP.
También prendieron fuego a un coche y a la  basura en las inmediaciones y quebraron vidrios de bancos y tiendas cercanas, saqueando negocios mientras el resto de los manifestantes les gritaba “¡Ladrones!” y “¡Sin vandalismo!”.
La policía intentó dispersarlos con gases lacrimógenos y balas de goma, así como con balas de plomo al cielo. Unos 80 policías aún están refugiados dentro de la Asamblea, y cinco resultaron heridos, según la policía militar.
La Asamblea sigue rodeada por manifestantes. Una hoguera arde frente al edificio.
Unas 100.000 personas protestan en Rio, según la policía militar.
En todo el país, los manifestantes convocados a través de las redes sociales y sin liderazgo político o social definido, denuncian el alza del precio del transporte y piden más inversiones en este sector, así como en salud y en educación.
AFP

En la Sala de la Biblioteca del palacio apostólico del Vaticano, el Papa Francisco recibió en una audiencia privada a Nicolás Maduro, quien dijo, según la agencia de noticias EFE, que “era un honor conocer al Papa”, “está muy impresionado y feliz por estar allí”.

maduro-con-el-papa-francisco-

El mandatario venezolano llegó acompañado de su esposa, Cilia Flores, y de una nutrida delegación compuesta entre otros por el ministro de Exteriores, Elías Jaua, el de Planificación, Jorge Giordani, y del Petróleo, Rafael Ramírez Carreño.
La cadena de televisión Telesur informó que: “el mandatario solicitaría la intercesión del jerarca de la Iglesia Católica para que El Venerable José Gregorio Hernández sea elevado a beato”.
“Maduro aprovechó la audiencia con el Santo Padre para llevarle como regalos retratos del libertador Simón Bolívar,  del líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, la Constitución del país,  un cuadro de la Virgen de Coromoto, patrona de Venezuela, y una escultura del doctor José Gregorio Hernández (1864-1919), que se encuentra en proceso de canonización”.
El Papa  entregó a Maduro una pluma estilográfica, y como ya hizo con los otros mandatarios latinoamericanos, el documento de las conclusiones de la reunión que celebró en Aparecida (Brasil) la Conferencia Episcopal Latinoamericana.
En la nota del Vaticano, se explicó que: “En el encuentro, que duró 20 minutos y se desenvolvió en un clima de cordialidad, se repasó la situación social y política de Venezuela después de la reciente muerte de Hugo Chávez”.
El Papa hizo referencia a la presencia histórica de la Iglesia Católica en el país y a su decisiva aportación en los ámbitos de la caridad, de la asistencia sanitaria y de la educación.
Además se concordó “en la necesidad de un diálogo sincero y constante entre la Conferencia Episcopal del país y el Estado para el desarrollo de toda la nación”.
Repasaron la situación general en Latinoamérica y en especial hablaron sobre el  proceso de paz que se está llevando a cabo en Colombia.

Cristina Kirchner volvió a defender este domingo la negociación con Irán por el atentado a la AMIA y remarcó que “sin la declaración de los acusados no hay juicio”.


“En  el país hay gente que no quiere o que no le conviene que se sepa la verdad”, así lo expresó la Presidenta  la red social Twitter, a la que subió una imagen de ella junto a Guillermo Borger, el nuevo titular de la AMIA, Leonardo Jmelnitzk, y el secretario de Culto Guillermo Oliveri, el pasado jueves en Casa Rosada.
La jefa de Estado  dijo: “CFK directa, como siempre. Hablé de la necesidad de avanzar en el esclarecimiento del atentado (causa judicial estancada)”. “Es imprescindible que declaren los acusados iraníes”.
Y enfatizó: “sin la colaboración de ese país, no habrá declaración”. “Sin declaración, no hay juicio. Sin juicio, no hay condena ¿Por qué será que siempre en la Argentina hay que explicar lo obvio?”.
La Presidenta  apuntó a quienes están acusados por ‘encubrimiento’ y ‘viven en Argentina’. “Todavía no se ha juzgado a nadie. La causa judicial por encubrimiento se inició el 15/2/2000. Sí, hace 13 años. Más de tres mandatos presidenciales”, y agregó: “Las elevaciones para juicio oral? Anotá: 25/6/2008 y 20/3/2012. El juicio oral? Bien, gracias.
Reclamos: de 7 a 13hs. en el mostrador del Tribunal Oral Nro 2”.
Resaltó los nombres de ‘los integrantes del Tribunal: jueces (Guillermo) Costabel, (Jorge) Gorini y (Pablo) Bertuzzi’.
“¿Se dan cuenta de qué hablamos, cuando hablamos de democratización de la Justicia?”.
Luego, enumeró a quienes están acusados por encubrimiento: “El ex juez (Juan José) Galeano, los fiscales (Eamon) Mullen y (José) Barbaccia; el ex jefe de la SIDE Jorge Anzorregui y otros funcionarios de dicho organismo; el expresidente de la DAIA Rubén Beraja; el expresidente (Carlos) Menem, los comisarios (José) Palacios y (Carlos) Castañeda”.
“Palacios ¿Se acuerdan? El ex jefe de la Policía Metropolitana. En fin. No sigo con la lista porque sino no termino más”. “¿Qué, no lo sabían? ¿Que cómo puede ser que estas cosas no se sepan o no salgan en los diarios? ¿O que no se escuchen los reclamos?”.
En tuits siguientes, la mandataria se quejó: “Hay gente que no quiere o no le conviene que se sepa la verdad. Son como el tero, que pone los huevos en un lado y grita en el otro”.