DAVID URRA / CONTRAINJERENCIA – Por eso es, o todo o nada. La economía norteamericana esta quebrada, las guerras desangran las finanzas, Rusia y China están perdiendo la tibieza y América Latina esta encontrando su identidad, que no es precisamente la de Norteamérica. Amerika se desploma en lo interno y lo externo, solo los Medios Masivos de “Confusión”, reflejan una imagen edulcorada e irreal de lo que pasa. Pero en su caída, lanza zarpazos en todas direcciones que no se pueden ignorar. Su poder es inmenso, tanto como su insensatez.
Este panorama “apocalíptico” parece salido de una novela Garciamarquiana, pero no es así, es el fiel reflejo de lo que vivimos. Lo peor de todo es que ahora le toca el turno a Venezuela y el “Eje de la Guerra” se ha preparado para ello.
La historia nos deja experiencias que no se pueden ignorar, es por ello que los venezolanos deben abrir bien los ojos para no fallar en el momento histórico que viven. No se trata de Chávez o Capriles, ni del color rojo o el blanco, ni de tal o cual partido, ni siquiera de planes de desarrollo. Se trata de la oportunidad histórica que tantos años a esperado este pueblo heroico, la de “hacer camino al andar”.
No hay dudas que hay múltiples indicios que señalan que el Plan urdido en los cuarteles de la Guerra Psicológico-Informativa en Fort Bragg Carolina del Norte, esta en marcha a toda maquina y aunque no será igual al aplicado en otros países, si tiene muchos puntos en común, los cuales analizaremos detenidamente en este trabajo.
Es necesario comenzar con decir que, la decisión de derrocar al Proceso Bolivariano liderado por Chávez en Venezuela, data del momento mismo en que este triunfo en las elecciones del 99. Que nadie tenga dudas de que en ese mismo momento las altas esferas en EE.UU enviaron la orden ejecutiva a su aparato de desestabilización y guerra para elaborar el Plan de contingencia.
Por lo general estos planes constan de varias etapas, según la metodología establecida en el Ejercito de EE.UU y muy especialmente en los tristemente celebres laboratorios de Guerra Psicológica del Ejercito de EE.UU en Fort Bragg, lo primero que se define es la situación del objeto a influenciar.
Venezuela, fue segmentada en estratos para poder determinar que hacer y con quien trabajar. Claro que todo este trabajo se planifica y ejecuta en las sombras y entre otras cosas se definen los métodos y medios a emplear y los procedimientos que serian mas ventajosos con cada grupo definido, sea pro chavista o de la oposición. Todos sin excepción estarán bajo la influencia psicológica e informativa.
Después se comienza a trabajar con medidas que pretenden preparar el terreno para las operaciones posteriores. El objetivo es establecer ciertos patrones que incidirán en los cambios de opiniones de los distintos grupos a influir.
Como es de esperar para estos objetivos se emplean los múltiples medios al alcance de los EE.UU y la oposición, que se alía en búsqueda de que “les saquen las castañas del fuego”. La campaña para desestabilizar al país ha sido intensa y a pesar de que en conjunto no ha tenido éxito, tampoco se puede decir que ha sido un fracaso.
Es muy difícil medir los resultados de estas operaciones a pesar de que se establecen patrones de medición. En el caso venezolano, los especialistas en OP de Fort Bragg, han fallado repetidamente, en parte por su falta de realismo y excesiva simplificación de sus acciones y en parte por las contramedidas que ha tomado el movimiento bolivariano.
Pero ahora se trata de otra cosa que no es comparable con lo que ha sucedido anteriormente.
Para América Latina, los EE.UU han utilizado con alta frecuencia esquemas de golpes de estado “blandos” (Honduras y Paraguay, los mas recientes), claro que si las cosas se le van de control, han aplicado la variante “violenta” (Chile, Panamá, Haití).
Tal parece que en estos momentos EE.UU, que ha subestimado tradicionalmente a A.L y piensa que con un poco de plata y alguna que otra prebenda, puede corromper a los políticos latinoamericanos, a comprendido que Venezuela es ya un caso que se les “ha ido de la mano” y no cabe otra practica que aplicar la fuerza y la violencia.
De esta forma veremos en el país sudamericano una variante más cercana a las medidas aplicadas contra Cuba, Siria, Irán, etc.
De hecho, silenciosamente sin que se levante mucho polvo, estas medidas preparatorias se han incrementado en los últimos tiempos. Veamos algunas de ellas:
- El acuerdo de crear en territorio colombiano varias bases de aseguramientos con EE.UU, responde al posible escenario militar que se creará al respecto.
- La intensa campaña de descredito contra Chávez y su proyecto, mas que tratar de debilitar las filas chavistas,pretende insuflar fuerzas a la oposición y de paso generar una matriz de opinión en la arena internacional. No es que no les interese destruir la unidad de los partidarios de Chávez, el problema esta en tener los elementos fundamentales para hiperbolizar los hechos que les conviene, no importa en nada la verdad o lo que ocurre, lo importante es lo que el enorme poder mediático que tienen haga creer que ocurre. Para EE.UU las cosas no ocurren en si, sino porque la CNN las difundió.
- Colombia juega un papel importantísimo en el caso de Venezuela, ya que es el posible trampolín por el que se generará el proyecto de desestabilización violenta.
- El anuncio de acuerdo de conversaciones con la guerrilla, puede ser real o puede ser una cortina de humo que oculte las acciones que los grupos de tropas especiales en la frontera común pudieran utilizar para operar, con el objetivo de desestabilizar alguna región venezolana, preferentemente donde la oposición posea el control de determinadas fuerzas, la policía por ejemplo. Esta estrategia ampliamente empleada en el medio oriente, les ha dado buen resultado allí. Se trata de crear una especia de zona en conflicto que pueda ser reconocida por ellos como legítima y que justificaría su participación. De hecho esta no es una idea nueva, ya en Cuba en 1961, cuando la invasión por Bahía de Cochinos, el plan era ese, crear una cabeza de playa, que permitiera trasladar un supuesto gobierno de exiliados radicados en Miami, los cuales solicitarían de inmediato el apoyo de EE.UU. De esta forma Washington tendría la autorización para intervenir. Es importante señalar que como es de esperar se emplearía el siempre esperado apoyo de la OEA que serviría para “intermediar”, aunque en la práctica solo daría el pretexto para la invasión.
- Los movimientos en el área de fuerzas del Comando Sur, aparentan ser rutinarios, pero en la práctica se evidencia su relación con el posible teatro de operaciones. Los países del ALBA, estarán dentro de ese plan, con el objetivo de “evitar” que se mezclen en el “conflicto” venezolano.
- Por ultimo, la aparición de un programa oculto de gobierno por parte de la oposición, demuestra que lo que hacen las fuerzas subordinadas a los intereses de EE.UU en Venezuela es seguir un patrón organizado y creado en Washington, que no deja dudas de que la oposición no pretende construir nada en Venezuela, solo destruir lo hecho.
Es de esperar que para la consecución de este plan se utilice alguna región colindante con Colombia, lo que facilitaría la logística de abastecer con armas y medios a los “sublevados” contra el Gobierno “usurpador” de Chávez.
Igualmente se aprovechará para desde la zona colombiana emplear todo tipo de medio de difusión que permita influir sobre los pobladores, realizando una campaña de mentiras y odio, lo que reforzara el trabajo de desestabilización.
Claro que se producirán provocaciones y actos de terror de lo cual será culpado el Gobierno de Chávez. Para ello no habrá escrúpulos, si hay que matar a pobladores civiles, poner una bomba en una embajada o volar en pedazos una instalación industrial, se hará en función del objetivo supremo, derrocar a Chávez, cueste lo que cueste.
A los venezolanos que defienden su proceso, les espera en este escenario una difícil tarea, mantener las conquistas logradas y defenderse de la poderosa maquinaria de desestabilización que EE.UU posee y empleará sin dudas contra Venezuela.
Los casos de Iraq, Libia, Siria e Irán, por solo mencionar los más recientes, son ejemplos de lo difícil que puede ser la tarea, que por demás no es imposible.
El caso cubano es para Venezuela quizás el más cercano y las experiencias de los cubanos pueden ser muy importantes para los venezolanos.
Durante más de 50 años los EE.UU han experimentado todo tipo de métodos, procedimientos y argucias para derrotar a la revolución cubana, pero Cuba sigue en pie.
Por solo relatar algunos ejemplos, durante la operación “Mangosta” 1961 – 1962, en Cuba se realizaron mas de 5,000 acciones de sabotaje, siendo mas de 700 de gran envergadura.
Sobre Cuba se transmiten diariamente por más de 50 años, cientos de horas semanales de señales de radio y TV, todas tratando de Desinformar, Manipular, Denigrar, Confundir y Desprestigiar el proceso cubano.
Los EE.UU han gastado cientos de millones de dólares durante este tiempo en crear una disidencia anticubana dentro del país, comprando mentes, reclutando infames, captando corruptos y sumando a su carro a todo aquel que este dispuesto a venderse por un puñado de dólares.
Pero Cuba sigue ahí. Se han preguntado porqué.
Pues, porque los cubanos no se han dejado quitar las calles;
Porque han mantenido la unión en torno a sus dirigentes y sus dirigentes nunca se han apartado de su pueblo;
Porque no ha habido momento de la historia de Cuba en los últimos 50 años en que sus dirigentes no hayan estado junto a su pueblo, sin importar lo difícil que este ha sido;
Porque no se les ha permitido a los facinerosos que controlen los medios que son estratégicos para el país.
Porque cuanta medida han tomado contra el país, han respondido con medidas adecuadas y proporcionales sin que les tiemble la mano;
Porque se han protegido contra la influencia perniciosa de los medios estadounidenses;
Porque a cada acción en contra de su revolución, han respondido con otra acción que la anula;
Porque independientemente de los errores e inexactitudes, han sabido aprender de los errores y convertir con ello los reveses en victorias;
Porque no se han dejado confundir con los cantos de sirena del imperio:
Porque ni la amenaza mas terribles, cuando estaban bajo el peligro de ser barridos con las armas nucleares, les ha hecho retroceder ni titubear.
Podríamos señalar muchos más porqués, pero el más importante de todos es que los cubanos nunca se olvidaron de lo que tuvieron que andar para llegar hasta aquí.
Es por ello que Venezuela debe recordar sus tradiciones y pensar cuan importante es recordar lo que ha costado llegar hasta este proceso.
La oposición en Venezuela solo pretende restablecer sus privilegios. Solo hay que ver con quienes se reúnen, quienes los apoyan y de donde viene el dinero. Recuerden que “El que con lobos anda… a aullar aprende”.