Un informe regional del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) expresa gran preocupación por la situación de un grupo de 25 y 30 millones de personas que acaban de salir de la pobreza y advierte que podrían recaer en ella.
El estudio, presentado este martes en la sede del Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino) con sede en Panamá, identifica esa situación como la principal amenaza para el progreso de América Latina y el Caribe. También señala que gran parte la población vulnerable son jóvenes y mujeres con empleos precarios en el sector de los servicios. Otro de los puntos del documento hace hincapié en que esas personas integran un amplio grupo de 220 millones que son vulnerables a caer en la pobreza, aunque oficialmente no hayan sido clasificadas como pobres ni hayan logrado ascender a la clase media.
En este contexto, el PNUD explicó que los factores que inducen a la pobreza no son los mismos que evitan que la gente recaiga en ella. En la década pasada, el empleo y la educación eran claves para generar progreso, no obstante, en la actualidad se requiere de políticas que fortalezcan la protección social, el sistema de cuidado de niños y ancianos, los activos físicos y financieros, como una casa, un auto o las cuentas de banco que actúan como colchones en caso que estalle una crisis, además de la calificación laboral.
El PNUD hizo un llamado a repensar el modelo de desarrollo en la región y orientarlo hacia un concepto multidimensional que trascienda el simple crecimiento económico y responda a lo que propone la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible que invita a construir sociedades equitativas y a no dejar a nadie excluido. Naciones Unidas