A las 10 de la mañana comenzaron a llegar los primeros asistentes a Plaza Italia. La intendencia solo dispuso la calzada sur de la Alameda para el recorrido que concluyó a eso de las 13:30 horas, sobre el escenario montado en el parque Almagro. A diferencia de las últimas manifestaciones, y luego de dos años, la marcha volvió a pasar frente a la Moneda.
Un hito importante fue el hecho de que la movilización pasará frente al Palacio de Gobierno. Hace dos años, el gobierno de Piñera se opuso a que esto sucediera, cercando el lugar durante las últimas manifestaciones. A diferencia de aquellas marchas, las autoridades cedieron y autorizaron el recorrido por la Alameda. Pese a esto, solo una calzada fue permitida, quedando demostrado hoy que los ciudadanos y el movimiento social necesitan la abertura de toda la avenida, porque la convocatoria fue alta y el espacio el mínimo. Cien mil personas fue la cifra estimada por la organización.
La organización, a cargo de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES), la Confederación de Estudiantes de Chile (CONFECH) y la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (CONES), realizó un balance positivo de la manifestación. En el escenario, los dirigentes estudiantiles expresaron el mensaje de forma clara.
“Debemos ser protagonistas. Debemos seguir saliendo a las calles. En conjunto, todos los chilenos, todas las comunidades y el pueblo mapuche, vamos a reivindicar esto, vamos a construir la educación que queremos. Lo único que se descarta es quedar inmovilizados”, señaló Lorenza Soto, vocera de la ACES.
Hace dos días, el ministro de justicia, José Antonio Gómez, no entregó ninguna solución para el petitorio presentado por los comuneros Mapuches, que tiene como objetivo, lograr el indulto humanitario para el peñi José Mariano Llanca Tori –quien padece un cáncer terminal-, el traslado de Luis Marileo, Leonardo Quijón y Cristian Levinao al centro de estudio y trabajo, y la revisión de las causas de todos los casos que involucren a presos mapuches. Fredy Marileo, vocero de los comuneros, también estuvo hoy en el escenario para realizar un llamado a colaborar con la causa.
“El gobierno se está negando a todas las peticiones del pueblo mapuche y de todos los movimientos sociales. La pelea es contra el estado opresor, contra el capitalismo. Vamos a seguir resistiendo y nuestra lucha será hasta las últimas consecuencias”, afirmó Fredy.
El diputado independiente, ex dirigente estudiantil, Gabriel Boric, acompañó la manifestación. “Esta es una demostración de fuerza del movimiento estudiantil, una señal de fuerza que sigue manteniendo la capacidad de convocatoria. El gobierno tiene que tomar posiciones, si se queda con el movimiento o con los empresarios. Acá esta la unidad del pueblo, de las personas que quieren que haya derechos y no mercado. Han pasado de la ambigüedad a las contradicciones”, señaló.
Melissa Sepúlveda, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, recalcó la importancia de salir a las calles y construir la educación en conjunto, además de la ineficacia que ha tenido el gobierno en la solución del problema. “Los plazos están atrasados, la reforma educacional se exige con urgencia hace 8 años. Los protagonistas son el pueblo de Chile, los que quieren una nueva educación, no la nueva mayoría y el gobierno”, afirmó.
Hasta ese momento el acto seguía su orden. Las personas bailaron y la música se escuchaba desde varias cuadras alejadas del escenario. El comportamiento se mantuvo ejemplar hasta que la marcha comenzó a ser diluida y desfragmentada por el accionar de Carabineros.
El enfrentamiento continúa
Los carros lanza agua cercaron el cuadrante entre las calles Santa Isabel, San Ignacio y Lord Cochrane, disipando a los asistentes a dirigirse hacia la Alameda. Encapuchados opusieron resistencia arrojando piedras y realizando barricadas para detener el avance de los funcionarios de fuerzas especiales.
En la esquina de Santa Isabel con San Ignacio, los carabineros no dejaban pasar a los asistentes que querían ir hacia el sector sur de la ciudad. Un estudiante secundario de 16 años terminó con su nariz quebrada luego de recibir un golpe por parte de un funcionario policial cuando intentaba correr entre la gente.
El humo de las bombas lacrimógenas contaminó todo el lugar. Las rejas instaladas por la intendencia para encausar la marcha terminaron sobre la calle, para ser utilizadas como barricadas por los encapuchados.
Al llegar nuevamente a la Alameda, manifestantes volvieron a realizar barricadas, impidiendo el tráfico, que a esa hora, ya había sido restituido. Rápidamente los carros de carabineros llegaron para desperdiciar la última agua de la jornada y disipar finalmente a los jóvenes.