La FAO y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) presentaron hoy una estrategia para la erradicación total de la peste de los pequeños rumiantes (PPR) en 2030 durante una conferencia internacional en Abiyán, capital de Costa de Marfil.
Con este plan el mundo podrá acabar definitivamente con una devastadora plaga que sufren cabras y ovejas, liberando a cientos de millones de familias rurales de una de las principales amenazas para su seguridad alimentaria y sus medios de subsistencia.
En un comunicado la FAO dijo que esta dolencia se ha expandido rápidamente en los últimos 15 años y está presente en alrededor de 70 países. Si los rebaños no son vacunados, hasta el 90 por ciento de los animales infectados pueden morir. “Si podemos proteger a los pequeños rumiantes, protegemos a millones de pequeñas comunidades en todo el mundo”, explica Juan Luborth, veterinario en jefe de la FAO. Hasta ahora, la peste bovina es la única enfermedad animal que se ha logrado erradicar. La FAO y la OIE lideraron la campaña y lograron que esta catastrófica plaga del ganado vacuno, causa de hambrunas y del colapso de imperios, se declarara definitivamente extinguida en 2011.
Según la FAO hay 2.100 millones de pequeños rumiantes en todo el mundo y esta enfermedad, que provoca fiebre alta y colapso respiratorio, genera pérdidas globales anuales de entre 1.450 y 2.100 millones de dólares.