viernes, 1 de agosto de 2014

Recursos pesqueros.

El Wetripantu, los ciclos naturales y la administración de los recursos pesqueros

(AW) ¿No sería lógico pensar que la  explotación de los recursos marinos vivos también debería respetar estos ciclos anuales? ¿Por qué el calendario de la administración y ordenamiento de los recursos pesqueros está basado en la fijación de cuotas de enero a diciembre; es decir, un criterio de administración política heredada de los colonizadores que funcionaban de acuerdo al calendario del Hemisferio Norte?.


Por: Eduardo Tarifeño
Departamento de Zoología,
Universidad de Concepción
Junio de 2014.
La semana pasada fue tema de noticias la celebración del “We Tripantu” que significa “nueva salida del Sol” por los pueblos originarios, fieles a sus cosmovisión que la vida en la Naturaleza ocurre en base a ciclos que se repiten anualmente, determinados  por  la traslación de la Tierra alrededor  del Sol. En esta ceremonia, indistintamente que sea celebrada por mapuches, quechuas,  aimaras o atacameños, los  pueblos originarios agradecen a la Naturaleza o Madre Tierra, el inicio del nuevo ciclo de la vida e invocan que las cosechas sean abundantes y  que  la reproducción del ganado sea fecunda.
No hay dudas que estos ciclos naturales  (invierno, primavera, verano  y otoño) que vemos en la superficie terrestre, también ocurren en los océanos, especialmente en  las zonas templadas de latitudes medias, donde los ciclos de abundancia de fitoplancton,  de huevos, de larvas y de juveniles, se sincronizan armoniosamente por efectos de señales ambientales que aseguran  que todos procesos biológicos  ocurran en el momento que corresponde para lograr una mayor eficiencia en los  costos energéticos.  Así como los campesinos programan la preparación de la tierra, las siembras y las cosechas de acuerdo a estos ciclos naturales, en la acuicultura marina también se puede seguir la secuencia de  recolección o captura de semillas o plántulas a fines del invierno o comienzo de primavera,  siembras  en primavera, crecimiento en verano  y cosecha en otoño.
¿No sería lógico pensar que la  explotación de los recursos  marinos vivos también debería respetar esto ciclos anuales?  ¿Por  qué el calendario de la administración y ordenamiento de los recursos pesquero  está basado en la fijación de cuotas de enero a diciembre; es decir, un criterio de administración política heredada de los colonizadores que funcionaban de acuerdo al calendario del Hemisferio Norte? A lo mejor, las evaluaciones de stock e indirectas  tienen un sesgo importante  al ejecutarse en períodos donde las abundancias de huevos y larvas y la composición de talla-edad de las poblaciones no están en su momento máximo de abundancia. Es más, es conocido que los ciclos naturales no ocurren todos los años exactamente en las mismas fechas de calendarios,  por lo que los programas de muestreos  y/ evaluaciones deberían considerar estas variables. ¿Qué pasaría si las cuotas de pesca extractivas fueran asignadas dentro de un calendario de julio-junio y no de enero-diciembre como lo indica la ley?
Al  parecer, nuestra manera de observar la naturaleza está distorsionada por un “calendario de administración política” que es ajeno a nuestra realidad ambiental. Este sincretismo está claramente demostrado en la declaración del”Día Nacional de los Pueblos  Indígenas” (¿por qué no “Pueblos Originarios”?) que establece por ley el 24 de Junio (día de San Juan) para dicha conmemoración, cuando en  realidad debiera ser el 21 de junio, día cuando astronómicamente ocurre el solsticio de invierno, evento cósmico  que marca el comienzo del renacer de la Naturaleza. Este día  fue establecido por el Estado de Chile el 24 de junio de 1998, mediante Decreto Supremo N° 158 durante el Gobierno del Presidente Eduardo Frei Ruz-Tagle.  No hay que olvidar, que los colonizadores  tenían por misión de fe, borrar toda huella de “paganismo” (así se interpretaba el We Tripantu)  cambiando esta  conmemoración autóctona de miles de años  por el calendario católico  y rendir homenaje  a  uno de sus principales santos. Ojalá que el futuro Ministerio de Asuntos Indígenas, propuesto recientemente por Gobierno de la Presidenta Bachelet, cambie esta gran aberración de interpretación histórico-antropológica.
Eduardo Tarifeño Silva, Biólogo Marino, Ph.D.
Departamento de Zoología, Universidad de Concepción
Ex Presidente “Corporación WALLMAPU” Pro recuperación Laguna Grande, San Pedro de la Paz, Región del Biobío.
Extractada de Ecoceanos.

Gaza.

opinión

Una declaración firmada por 47 galardonados con el Right Livelihood Award de 32 países condena la matanza de civiles, muchos de ellos, niños. Tres galardonados con el Right Livelihood Award viven y trabajan en la zona de conflicto.

“Como galardonados con el Right Livelihood Award, popularmente conocido como “Premio Nóbel Alternativo”, nosotros condenamos enérgicamente la matanza de cientos de niños y civiles inocentes ejecutada en Gaza por el Ejército israelí y el indiscriminado lanzamiento de misiles por parte de Hamas sobre civiles de Israel, al tiempo que lamentamos el continuo sufrimiento de los habitantes de Gaza.

Gaza enfrenta desabastecimiento de agua y electricidad, de hospitales, médicos y medicinas, mientras las bombas y las balas matan e hieren tanto a la sociedad civil como a los trabajadores de salud, en una espiral de violencia y desesperanza. Aproximadamente un 24% de todos quienes perdieron sus vidas en Gaza como resultado de los bombardeos de Israel y su invasión militar, son niños.

Sin embargo, la responsabilidad de estas muertes no es solamente el producto conjunto y múltiple de los soldados de Israel, de los luchadores de Hamas y de sus gobiernos. Otros gobiernos también son responsables, tanto directa como indirectamente, a través de la transferencia de armas, asesoramiento militar y silencio.

Estos países y Naciones Unidas parecen no haber aprendido del pasado. Mientras tanto, aún cuando la violencia crece rápidamente en Gaza, las negociaciones de paz se mueven a un ritmo increíblemente lento, dificultadas por los intereses particulares de países que no sufren derramamiento de sangre por este conflicto. El diálogo y las negociaciones no pueden ser reemplazadas por el uso de la fuerza militar. La venganza solo produce venganza y los derramamientos de sangre solo producen más derramamientos de sangre.

Nadie puede olvidar las recientes imágenes de cuadernos de escuela rotos en las calles de Gaza y las vidas rotas de los niños que los usaron. Sus cuerpos sin vida desparramados cerca de sus cuadernos, que nunca van a ser usados nuevamente, describen la trágica pintura de una crueldad sin límite. Nadie tiene el derecho de terminar con sus vidas ni de amenazar la vida de aquellos niños que siguen sobreviviendo. Ellos también son nuestros niños.

En este contexto nosotros apoyamos con fuerza la el extraordinario y valeroso trabajo, determinación y perseverancia -entre el tronar de las bombas- de nuestro colega Raji Sourani (RLA 2013, Palestina) y sus colegas del Centro Palestino de Derechos Humanos en Gaza, quienes están denunciando las matanzas de civiles inocentes y la continuidad de una guerra sucia no declarada, que va contra los principios de la legislación humanitaria internacional. Nosotros también queremos expresar nuestra profunda admiración por el trabajo de organizaciones de paz de Israel como Gush Shalom (RLA 2001) y el increíble trabajo de todo el personal médico que opera actualmente en Gaza, continuamente señalado por nuestros amigos de Médicos para los Derechos Humanos de Israel (RLA 2010), que siguen portando la antorcha de la humanidad pese a estar expuestos a las inhumanas máquinas de la guerra.

Como galardonados con el Right Livelihood Award nosotros instamos a las Naciones Unidas, a la Unión Europea y a organizaciones regionales como la Liga Árabe y la Organización de Estados Americanos (OEA), y a países de todo el mundo, a unir sus voces, a condenar estas inaceptables violaciones de derechos humanos, a requerir un inmediato cese del fuego, a suspender el bloqueo a Gaza y a pedir nuevas tratativas de paz. Igualmente detener todas las acciones que perpetúan este conflicto, que dificultan una resolución pacífica y que proveen armas a las partes en conflicto. Si nosotros no actuamos con urgencia, más niños y población inocente van a ser asesinados en los próximos días, en las próximas horas, en los próximos minutos, en los próximos segundos”.

La Fundación Right Livelihood Award: fue fundada en 1980, el Right Livelihood Award –conocido también como Premio Nóbel Alternativo- es entregado anualmente en el Parlamento Sueco. Fue creado para “honrar y apoyar las respuestas prácticas y ejemplares a los desafíos actuales más urgentes”. Jacob von Uexkull, un filatelista profesional de origen sueco-alemán, vendió su colección de estampillas para obtener los primeros recursos para financiar este premio. Desde entonces, la Fundación se sostiene gracias a donaciones individuales. A la fecha, han sido galardonados 153 personas y organizaciones pertenecientes a 64 países.

Default argentino.

internacional

El Secretario General de la ONU expresó preocupación por las consecuencias que podría tener sobre el pueblo argentino el incumplimiento del pago de la deuda de los “fondos buitre”, que asceinde a 1.300 millones de dólares por la compra de bonos y unos 200 millones en concepto de intereses.

Ban Ki-moon espera que ese impacto sea mínimo, dijo su portavoz en Nueva York, Sthepane Dujarric, durante la reunión diaria con la prensa en la sede de la ONU.

“El Secretario General no puede hacer comentarios sobre los procedimiento legales, no obstante, indicó que este caso impone preguntas clave sobre la reestructuración de la deuda externa”, puntualizó el vocero.

Ban considera que estos temas deberían ser abordados por los Estados miembros y confió en que la comunidad internacional entable más diálogos sobre eta materia, añadió Dujarric.

Resistencia obrera en Buga.

Carpa de resistencia obrera en Buga



En la ciudad de Buga se encuentra una planta de la empresa Cristar S.A, de propiedad de Owens-Illiniois, una compañía multinacional de los Estados Unidos, especializada en la producción de envases de vidrio, que controla el 80 por ciento de la actividad mundial de ese sector y que tiene 24 plantas distribuidas en varios continentes. Esta empresa implementa la flexibilización laboral, con el fin de incrementar sus ganancias, destacándose el impulso a la subcontratación. De un total de 750 trabajadores que laboran en sus instalaciones, solamente 120 tienen contrato directo y estabilidad laboral, mientras que la mayoría está vinculada por Cooperativas de Trabajo Asociado. Quienes gozan de estabilidad hacen parte de la planta de personal administrativo, formado por ingenieros, y jefes de área. La subcontratación se ha impuesto como norma en la productora de vidrio, hasta el punto que muchos operarios tienen contratos por término fijo desde hace diez o más años. Cada uno de ellos tiene que mendigarle a las cooperativas la renovación de sus contratos cuando éstos están feneciendo.
Además, se ha generalizado la precarización laboral porque los trabajadores no tienen una jornada fija y muchos de ellos operan en forma continua durante 16 horas, como sucede con los braseros, no cuentan con seguridad social ni servicios de salud, ya que éstos son pagados en su totalidad por los propios trabajadores y tampoco se les brinda la dotación adecuada para realizar sus actividades. Como resultado de esas indignas condiciones laborales, un grupo de 35 obreros decidió crear el Sindicato de Trabajadores Disponibles y Temporales (SINTRADIT), que, siguiendo los procedimientos legales, elaboró un pliego de peticiones y lo presentó a la empresa el 24 de octubre de 2011. Como represalia, Cristar procedió a echar a la calle, literalmente, a 30 de los miembros del sindicato recién creado. Para ello, ordenó a sus celadores que no dejaran ingresar a las instalaciones de la empresa a los “conflictivos” trabajadores. Eso sucedía el 24 de octubre de 2011. Con este hecho, las directivas de Cristar pensaban que habían terminado con el incómodo sindicato, pero no fue así, porque desde esa misma fecha, los trabajadores afectados por la arbitrariedad de la empresa decidieron levantar una carpa en las afueras de la fábrica.
 
Han pasado casi tres años y los trabajadores que adoptaron ese valiente decisión se mantienen, con coraje y dignidad, en el mismo lugar en el que decidieron iniciar su pacífica y justa protesta, para que les sean reconocidos sus derechos, entre ellos el de asociación. Los trabajadores de la carpa cuentan los días que llevan en resistencia, como prisioneros de la arbitrariedad de la multinacional que son. En un cartel que se encuentra a la vista pública se puede leer: “Llevamos ---días en resistencia obrera contra la política explotadora de Cristar S.A.S, filial del monopolio norteamericano Owens-Illinois”. Cuando yo visite a los trabajadores llevaban 959 días en su carpa. 
 
El presidente de SINTRADIT, Arles Antonio Mejía, nos cuenta que esta ha sido una experiencia dura y muy costosa en términos económicos, sociales y anímicos para sus compañeros de lucha, porque durante este tiempo muchos de ellos se han enfermado, se han disuelto los hogares por la carencia de ingresos de los obreros, han perdido sus viviendas al no poder pagar el arriendo o las cuotas de los préstamos. Todos estos problemas no han impedido que este grupo de trabajadores se mantenga en su proyecto de lucha, con varios objetivos: dar a conocer ante la ciudad y el país las consecuencias de la flexibilización laboral; señalar la responsabilidad de las empresas multinacionales en la explotación acentuada de los trabajadores; mostrar la complicidad del Estado colombiano en la persecución contra los sindicatos y sus miembros; y, lo más importante, demostrar con su ejemplo práctico que puede enfrentarse el poder del capital, incluso con pequeñas acciones, como las que ellos realizan.
Los trabajadores han podido subsistir hasta el día de hoy gracias a la solidaridad de otros trabajadores y pobladores de Buga. Aunque Cristar no lo quiera reconocer, la presencia de los trabajadores en las afueras de sus instalaciones les resulta molesta, porque no creía que se prolongara durante tanto tiempo y cuestionara su demagógica política de "Responsabilidad social empresarial", y su certificación, vaya chiste cruel, por garantizar los derechos laborales. Hasta el momento los trabajadores no han sido desalojados a la fuerza, porque se ha hecho una denuncia internacional entre sindicatos de otras plantas de Owens-Illinois, que ya conocen lo que sucede en Colombia y además han propuesto campañas organizadas de denuncia al respecto.
Durante 1000 días los trabajadores despedidos de la Cristar, sin recibir salario, con mística y compromiso con su causa han ido y venido a la improvisada carpa, en la que se han turnado a lo largo de las 24 horas de cada día para que siempre permanezca alguien en ese sitio, en el que cocinan, comen, duermen y comparten sus luchas y expectativas con sus compañeros de infortunio y con las personas, de Buga y de otros sitios del país, que los visitan periódicamente. Ellos nos dicen que esta lucha no es sólo de ellos ni por ellos, sino que es por el conjunto de trabajadores colombianos. Y en verdad, son un emblema de lucha, un símbolo de resistencia obrera y popular en pos de un trabajo digno.

(*) Renán Vega Cantor es historiador. Profesor titular de la Universidad Pedagógica Nacional, de Bogotá, Colombia. Autor y compilador de los libros Marx y el siglo XXI (2 volúmenes), Editorial Pensamiento Crítico, Bogotá, 1998-1999; Gente muy Rebelde, (4 volúmenes), Ed. Pensamiento Crítico, Bogotá, 2002; Neoliberalismo: mito y realidad; El Caos Planetario, Ediciones Herramienta, 1999; Capitalismo y Despojo, Ed. Pensamiento Crítico, Bogotá, 2013, entre otros. Premio Libertador, Venezuela, 2008. Su último libro publicado es Colombia y el Imperialismo contemporáneo, escrito junto con Felipe Martín Novoa, Ed. Ocean Sur, 2014.

Artículo publicado en papel en Periferia, Prensa Alternativa, No. 97, julio de 2014. Rebelión lo ha publicado con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes

Gaza.

La Casa Blanca condena el ataque a una de las escuelas de la ONU en Gaza

Tres soldados israelíes mueren al mientras "intentaban derribar un túnel" al sur de la franja

Niños en la zona de la escuela de la ONu atacada ayer. / ATLAS / REUTERS
la ONU en Gaza, donde murieron 16 palestinos. Israel admitió haber abierto fuego en las inmediaciones del colegio, convertido en albergue para desplazados por la invasión israelí. La agencia para los refugiados palestinos de la ONU, UNRWA, acusó directamente a los israelíes de haber perpetrado este nuevo ataque mortal contra uno de sus colegios en Gaza. Entre los al menos 16 muertos había seis niños y dos trabajadores de UNRWA. El centro acogía a más de 3.200 palestinos. Es una de las escuelas que Naciones Unidas mantiene en el campo de refugiados de Yabalia, al norte de la Franja. El portavoz de las Fuerzas Armadas israelíes, el teniente coronel Peter Lerner, aseguró están “investigando” la matanza en la escuela de Yabalia.
Por la tarde, un ataque en un mercado de gasóleo del distrito oriental de Shiyaiya, donde operan las tropas israelíes, mató a 17 civiles palestinos. Un primer bombardeo provocó un gran incendio que atrajo a bomberos, ambulancias y curiosos. Pero siguieron cayendo proyectiles, que causaron una escabechina entre estos civiles y los periodistas presentes.

Tras condenar el bombardeo del refugio de la ONU en Yabalia, Estados Unidos anunció el envío de nuevas remesas de armas a Israel, que está vaciando sus arsenales sobre la franja de Gaza. Según la agencia Reuters, están de camino nuevos proyectilesde mortero de 120mm y granadas de 40mm, entre otras armas y municiones.Israel había anunciado un alto el fuego "humanitario" de cuatro horas a partir de las tres de la tarde. Pero el cese de hostilidades no se aplicó en las zonas con presencia militar israelí. Horas después de la matanza, seguían bombardeando la zona periódicamente con morteros e hiriendo a cualquiera que se acercase.
El Ejército confirmó más tarde la muerte de tres soldados israelíes en el distrito de Jan Yunis, al sur del enclave palestino. Trataban de "derribar un túnel". Israel ha perdido 56 soldados y 3 civiles en esta ofensiva. Del lado palestino, los muertos superan ya los 1.350, el 75%, civiles. 350 de los muertos palestinos eran niños.
Reacciones del portavoz de Hamás ante la tregua de cuatro horas anunciada por Israel. /REUTERS LIVE!
En Yabalia, más de 500 familias creyeron que la bandera y las divisas de la ONU les resguardarían de los cañones y de la aviación israelíes. Antes del amanecer del miércoles, al menos tres proyectiles golpearon el área. Destruyeron un aula atestada de gente, los servicios y un pequeño parque adyacente donde los desplazados palestinos dejaron más de una docena de mulas y burros. Sus cadáveres destripados señalaban la entrada al recinto, claramente marcada con los colores de Naciones Unidas. Otros portavoces admiten que las fuerzas israelíes dispararon en la zona, “en respuesta” a presuntos ataques desde las “proximidades” de la escuela.
La agencia de la ONU ha condenadoel bombardeo: “La pasada noche, unos niños murieron mientras dormían junto a sus padres en el suelo de aulas declaradas refugios de la ONU en Gaza. Matar a niños mientas duermen es una afrenta contra todos nosotros y un motivo de vergüenza universal”. El texto denuncia “en los términos mas firmes esta grave violación de las leyes internacionales por parte de las fuerzas israelíes”. El secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, habló de un "ataque injustificable".
Es la segunda escuela de la ONU en la que Israel provoca una matanza desde el inicio de la ofensiva sobre Gaza, el pasado 8 de julio. Israel admite haber bombardeado un colegio en Beit Hanún el pasado jueves. Contra toda evidencia, el Ejército asegura que “estaba vacío” cuando lo golpearon con “una granada” de mortero. Pero patio y los pasillos encharcados de sangre de la escuela de la ONU, así como diversos supervivientes, contaban otra historia: la ONU estaba preparando la evacuación del refugio cuando Israel la bombardeó con varias granadas de mortero. 16 personas murieron en el ataque a la escuela de Beit Hanún, el jueves pasado, entre ellas un bebé y varios niños.
El martes por la noche en Yabalia, Raad Abdalal, de 19 años, dormía a raso en el patio del refugio de Yabalia cuando empezaron los bombardeos de Israel en la zona. Cuenta que toda el área empezó a iluminarse con fuego de aviación y de tanques. Sin otro lugar adónde ir, los desplazados trataron de meterse en las aulas. Junto a una de ellas, a la izquierda de la entrada al recinto, cayó un proyectil que hundió una pared y mató a un grupo de personas que intentaban descansar en sus colchonetas. Cuenta Adalal que allí se resguardaba Said Abu Yalala.
Escapó de la devastación de la localidad norteña de Beit Hanún, invadida por Israel la semana pasada. Murió en el bombardeo cuando dormía “junto a un grupo de niños”. Por la mañana quedaban grandes pedazos de gomaespuma empapada de sangre.
Ahmed Mosa, de 50 años, colaboró con Abdalal en el rescate de un hombre al que las bombas del miércoles “arrancaron los dos brazos”. Le dieron algún auxilio y trataron de parar la hemorragia hasta que llegaron las ambulancias. “Tardaron más de una hora”, recuerda. Los bombardeos implacables en la zona impidieron la llegada inmediata de los servicios de emergencia.
Más de 215.000 de los alrededor de 1,8 millones de habitantes de la Franja han buscado refugio en escuelas de la ONU. Con una nueva oleada de amenazas telefónicas masivas y mediante la distribución de octavillas, las Fuerzas Armadas israelíes ordenaron el martes la “evacuación” de diversos barrios y municipios del este y del norte del enclave palestino. La orden afecta a más de 400.000 gazatíes, que están viendo cómo las bombas de Israel también matan en los refugios de la ONU, los únicos lugares que creían seguros.