BRASIL
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, renovó sus críticas contra Estados Unidos por espionaje, e instruyó a parlamentarios oficialistas para que prioricen la aprobación del marco civil de Internet, luego de que Canadá respondiera el pedido de explicaciones.
El gobierno canadiense envió este martes una nota a Rousseff, donde resalta las "relaciones bilaterales" y expresa su preocupación luego de que se revelara que los agentes de ese país invadieran las comunicaciones del Ministerio de Minas y Energía.
En ese marco, Rousseff recordó la conversación que mantuvo hace un mes, durante la cumbre del G20 en Rusia, con su colega norteamericano Barack Obama, a quien exigió explicaciones por las interferencias de la agencia NSA.
"Del mismo modo que hablé ante la ONU (contra el ciber espionaje) hablé ante él (Obama), es inadmisible este tipo de comportamiento entre países que tienen relaciones, y dejé claro que Brasil se sabe defender", declaró ayer Rousseff al canal de televisión SBT.
Por medio de los documentos obtenidos por el exconsultor de la NSA, Edward Snowden, se revelaron intercepciones en el despacho de Rousseff y en Petrobras, así como acciones clandestinas del espionaje de Canadá en el Ministerio de Minas y Energía.
"Qué historia es ésa de estar sondeando, ¿Todo esto es por causa del terrorismo?", indagó Rousseff con tono firme, retomando la idea sobre que las operaciones de inteligencia en realidad están motivadas en intereses económicos e industriales.
Por otra parte, hoy el primer ministro canadiense, Stephen Harper, declaró estar "muy, pero muy preocupado" con la repercusión en Brasil de la noticia de que la Agencia de Seguridad en Comunicaciones de Canadá interceptó informaciones del Ministerio de Minas.
"Es inadmisible este tipo de comportamiento entre países que tienen relaciones"
Dilma Rousseff
Luego de que Rousseff deploró ayer el hecho, el ministro de Minas y Energía, Edison Lobao, se manifestó en igual sentido pero aclaró que el caso de espionaje no alterará el llamado a licitación internacional por el megacampo de petróleo Libra, ubicado en el litoral atlántico, previsto el 21 de octubre.
Además, la embajada de Canadá en Brasil dijo que el presunto espionaje que el país del norte habría aplicado está siendo discutido "entre gobiernos" y aprovechó para destacar la importancia de las relaciones bilaterales y resaltar el "trabajo conjunto" que llevan adelante ambas naciones.
Ayer el ministro de Relaciones Exteriores, Luiz Alberto Figueireido, convocó al embajador canadiense, Jamal Khokhar, para manifestarle la "indignación del gobierno brasileño y pedir explicaciones sobre la noticia de que las comunicaciones del Ministerio de Minas y Energía son objeto de espionaje", según reportó un comunicado de Cancillería, reseñó hoy la agencia DPA.
Por las denuncias de espionaje a Brasil, la presidenta brasileña finalmente suspendió una visita de Estado a Washington para el 23 de octubre y pronunció un severo discurso en la ONU contra la violación de la privacidad en la web.
Además envió al Congreso el proyecto del Marco Civil de Internet, impulsó la creación de una Comisión Investigadora Parlamentaria del Espionaje y prometió aumentar recursos para contar con un satélite.
En esa línea, se reunió con legisladores a quienes dijo que "ahora nuestra prioridad es que el Marco Civil de Internet (sea tratado) la próxima semana".
La normativa incluye entre sus artículos algunos que imponen a las empresas Google, Microsoft y Facebook a que el acopio de datos sobre usuarios permanezca en Brasil, como condición para que puedan ser autorizadas a operar en el país.
La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, renovó sus críticas contra Estados Unidos por espionaje, e instruyó a parlamentarios oficialistas para que prioricen la aprobación del marco civil de Internet, luego de que Canadá respondiera el pedido de explicaciones.
El gobierno canadiense envió este martes una nota a Rousseff, donde resalta las "relaciones bilaterales" y expresa su preocupación luego de que se revelara que los agentes de ese país invadieran las comunicaciones del Ministerio de Minas y Energía.
En ese marco, Rousseff recordó la conversación que mantuvo hace un mes, durante la cumbre del G20 en Rusia, con su colega norteamericano Barack Obama, a quien exigió explicaciones por las interferencias de la agencia NSA.
"Del mismo modo que hablé ante la ONU (contra el ciber espionaje) hablé ante él (Obama), es inadmisible este tipo de comportamiento entre países que tienen relaciones, y dejé claro que Brasil se sabe defender", declaró ayer Rousseff al canal de televisión SBT.
Por medio de los documentos obtenidos por el exconsultor de la NSA, Edward Snowden, se revelaron intercepciones en el despacho de Rousseff y en Petrobras, así como acciones clandestinas del espionaje de Canadá en el Ministerio de Minas y Energía.
"Qué historia es ésa de estar sondeando, ¿Todo esto es por causa del terrorismo?", indagó Rousseff con tono firme, retomando la idea sobre que las operaciones de inteligencia en realidad están motivadas en intereses económicos e industriales.
Por otra parte, hoy el primer ministro canadiense, Stephen Harper, declaró estar "muy, pero muy preocupado" con la repercusión en Brasil de la noticia de que la Agencia de Seguridad en Comunicaciones de Canadá interceptó informaciones del Ministerio de Minas.
"Es inadmisible este tipo de comportamiento entre países que tienen relaciones"
Dilma Rousseff
Luego de que Rousseff deploró ayer el hecho, el ministro de Minas y Energía, Edison Lobao, se manifestó en igual sentido pero aclaró que el caso de espionaje no alterará el llamado a licitación internacional por el megacampo de petróleo Libra, ubicado en el litoral atlántico, previsto el 21 de octubre.
Además, la embajada de Canadá en Brasil dijo que el presunto espionaje que el país del norte habría aplicado está siendo discutido "entre gobiernos" y aprovechó para destacar la importancia de las relaciones bilaterales y resaltar el "trabajo conjunto" que llevan adelante ambas naciones.
Ayer el ministro de Relaciones Exteriores, Luiz Alberto Figueireido, convocó al embajador canadiense, Jamal Khokhar, para manifestarle la "indignación del gobierno brasileño y pedir explicaciones sobre la noticia de que las comunicaciones del Ministerio de Minas y Energía son objeto de espionaje", según reportó un comunicado de Cancillería, reseñó hoy la agencia DPA.
Por las denuncias de espionaje a Brasil, la presidenta brasileña finalmente suspendió una visita de Estado a Washington para el 23 de octubre y pronunció un severo discurso en la ONU contra la violación de la privacidad en la web.
Además envió al Congreso el proyecto del Marco Civil de Internet, impulsó la creación de una Comisión Investigadora Parlamentaria del Espionaje y prometió aumentar recursos para contar con un satélite.
En esa línea, se reunió con legisladores a quienes dijo que "ahora nuestra prioridad es que el Marco Civil de Internet (sea tratado) la próxima semana".
La normativa incluye entre sus artículos algunos que imponen a las empresas Google, Microsoft y Facebook a que el acopio de datos sobre usuarios permanezca en Brasil, como condición para que puedan ser autorizadas a operar en el país.