La ceremonia comenzó con el Himno Nacional sudafricano a las 11:58 hora local (6:58 de Argentina), con una hora de retraso debido al gran número de mandatarios que quieren despedirse del expresidente de Sudáfrica, considerado uno de los iconos del siglo XX.
Miles de personas esperaron durante horas el comienzo de la ceremonia, cantando y bailando bajo la lluvia o al tibio reparo de un paraguas, para rendir el que se espera que sea el mayor homenaje de la historia de este tipo, informó la agencia de noticias EFE.
Tras escuchar el Himno comenzaron las alocuciones, entre las que están previstas las de los presidentes de EEUU, Barack Obama; de Brasil, Dilma Rousseff; y de Cuba, Raúl Castro, cuyo hermano Fidel mantuvo una gran amistad con Mandela.
Precisamente, el presidente cubano fue uno de los primeros en llegar al recinto donde, al ser anunciada su presencia, recibió una sonora ovación de los miles de sudafricanos que ocupan las gradas del estadio.
También fue recibido entre aplausos el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, quien llegó casi media hora después de las 11 (6 de Argentina) horario previsto para el inicio de la ceremonia.
Como contracara, la llegada del actual presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, fue abucheada por los asistentes, que lo silbaron de nuevo al ser presentado.
Zuma, quien recibió con gesto contrariado los silbidos y abucheos, se encargará de cerrar las intervenciones de los mandatarios invitados a la ceremonia, que tiene una duración prevista de cuatro horas.
Uno de los momentos más emotivos previos a la ceremonia, fue cuando Winnie Mandela, la segunda mujer del ex presidente sudafricano, y su viuda, Graca Machel, se fundieron en un afectuoso abrazo y se besaron ante los miles de sudafricanos que abarrotan el estadio FNB, el mismo donde se jugó la final de la Copa del Mundo 2010.
Ambas de luto y muy emocionadas, quisieron hacer visible así el afecto que comparten por el ícono de la lucha contra el “apartheid”, mientras miles de asistentes celebraban el gesto.
Otros personajes conocidos que acudieron al homenaje son el líder de U2, Bono, y la actriz sudafricana ganadora de un Oscar, Charlize Theron, así como la modelo Naomi Campbell, vestida de riguroso luto.
Cerca de un centenar de jefes de Estado y de Gobierno asisten al acto, junto a las miles de personas presentes en el estadio, uno de los diez más grandes del planeta. El vicepresidente Amado Boudou lo hace en representación de Argentina.
Durante toda la mañana, ríos de gente se acercaron en transporte público al escenario de la ceremonia, que finalmente no se llenó debido a la intensa lluvia que desde ayer cae en Johannesburgo.
En el marco de los homenajes que se realizarán hasta las exequias del próximo domingo, en la calle Vilakazi, donde se ubicaba la casa de Mandela y epicentro del recuerdo del líder de la lucha contra el “apartheid”, se erigió ayer un muro de 20 metros de extensión para que sea cubierto de mensajes de amor a Madiba, como se conoce cariñosamente a Mandela en Sudáfrica.
Las exequias serán el domingo en Qunu, la pequeña aldea de la región más pobre de Sudáfrica donde creció el líder y allí se espera que asistan unas 9.000 personas.
Mandela falleció el pasado jueves a los 95 años en su domicilio de Johannesburgo, tras una larga convalecencia por problemas respiratorios.