La instalación repudiaba la mutilación genital femenina y fue realizada por el artista Makode Aj Linde, de origen africano. La cabeza de Linde formaba parte de la instalación y gritaba cada vez que alguien cortaba un pedazo del pastel.
“En nuestra opinión, esto simplemente se suma a la burla del racismo en Suecia”, dijo Kitimbwa Sabuni, portavoz de la Comisión Nacional Afro-sueca, y agregó: “Este fue un espectáculo racista”.
Moderna Museet, la galería que albergaba la instalación, afirmó que la obra tenía la intención de plantear la cuestión de la mutilación genital.
La Asociación Nacional Afro-Sueca ha pedido la renuncia de la ministra, diciendo: “Su participación, como se ríe, bebe y come torta, simplemente añada el insulto contra las personas que sufren de insultos racistas y contra las mujeres afectadas por la circuncisión,” y agregó: “No tenemos ninguna confianza en ella.”
La ministra restó importancia a la controversia, diciendo: “Entiendo muy bien que esto es provocativo y que era una situación bastante extraña. Me invitaron a hablar en la Jornada Mundial de Arte de la libertad del arte y el derecho a provocar. Y entonces ellos querían que cortara el pastel.”
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