Las víctimas son el resultado de la represión policial que intentó interrumpir una manifestación en repudio al gobierno militar por la “inoperancia” de las fuerzas de seguridad durante los incidentes en el estadio de futbol de Port Said, que el miércoles pasado dejaron al menos 70 muertos y más de 300 heridos. Por los enfrentamientos, al menos 900 civiles y 60 policías resultaron heridos, y para esta tarde está prevista una nueva marcha a la plaza Tharir.
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