GUATEMALA
Para nadie es un secreto que en Guatemala se estudia en pésimas condiciones. Aquí la educación se ha convertido en mercancía y privilegio, los derechos de la niñez y la juventud son ignorados. No se trata sólo de una infraestructura abandonada, sino de prácticas opresivas propias de un sistema ineficiente, patriarcal y racista que en las últimas semanas ha mostrado su faceta más represiva.
Las y los estudiantes normalistas, que debieran estudiar con tranquilidad y seguridad, se han visto obligados a ponerse en riesgo, a sufrir los rigores de la resistencia al ocupar sus centros escolares para gritarle a esta sociedad que ya no se aguanta más; que en las escuelas normales no se les respeta y que las autoridades gubernamentales pretenden imponer cambios que ignoran la realidad de miles de familias y que benefician a las empresas y al mercado, no al estudiantado.
La ministra y las autoridades recurren a los golpes, gases y la violencia psicológica para instaurar un modelo educativo a todas luces privatizador ¿ignoran que la calidad educativa es tratar con dignidad a las personas? ¿Qué respeto pueden exigir si han manejado con irresponsabilidad una situación que ha llegado a extremos inadmisibles? ¿Por qué tratar como delincuentes a quienes defienden sus derechos? ¿Por qué el uso desmedido de la fuerza contra niñas desarmadas? ¿Por qué los medios de comunicación al igual que las autoridades criminalizan a la población estudiantil?
Nosotras condenamos estos hechos y responsabilizamos a la ministra de educación y al ministro de gobernación de vulnerar a las adolescentes al admitir públicamente que se les puede reprimir y violentar. Eso significa ¿que se vale atropellarlas y arrastrarlas de los cabellos como lo hizo un femicida la semana anterior? ¿Que se autoriza a la policía a seguir violentando el cuerpo y la dignidad de las mujeres?
Llamamos a la ciudadanía a pronunciarse por una educación pública con calidad humana, democrática y respetuosa en primer lugar de la dignidad y derechos las personas.
Exigimos que cese la violencia institucional contra las y los estudiantes normalistas.
LAS Y LOS ESTUDIANTES NO ESTAN CONTRA EL SISTEMA
EL SISTEMA ESTA CONTRA LAS Y LOS ESTUDIANTES
Estudiantes y Claustro Docente de la Maestría de Estudios de Género y Feminismos
de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales en Guatemala (FLACSO)
Asociación de Mujeres para Estudios Feministas
Comisión Universitaria de la Mujer de la Universidad de San Carlos de Guatemala
Para nadie es un secreto que en Guatemala se estudia en pésimas condiciones. Aquí la educación se ha convertido en mercancía y privilegio, los derechos de la niñez y la juventud son ignorados. No se trata sólo de una infraestructura abandonada, sino de prácticas opresivas propias de un sistema ineficiente, patriarcal y racista que en las últimas semanas ha mostrado su faceta más represiva.
Las y los estudiantes normalistas, que debieran estudiar con tranquilidad y seguridad, se han visto obligados a ponerse en riesgo, a sufrir los rigores de la resistencia al ocupar sus centros escolares para gritarle a esta sociedad que ya no se aguanta más; que en las escuelas normales no se les respeta y que las autoridades gubernamentales pretenden imponer cambios que ignoran la realidad de miles de familias y que benefician a las empresas y al mercado, no al estudiantado.
La ministra y las autoridades recurren a los golpes, gases y la violencia psicológica para instaurar un modelo educativo a todas luces privatizador ¿ignoran que la calidad educativa es tratar con dignidad a las personas? ¿Qué respeto pueden exigir si han manejado con irresponsabilidad una situación que ha llegado a extremos inadmisibles? ¿Por qué tratar como delincuentes a quienes defienden sus derechos? ¿Por qué el uso desmedido de la fuerza contra niñas desarmadas? ¿Por qué los medios de comunicación al igual que las autoridades criminalizan a la población estudiantil?
Nosotras condenamos estos hechos y responsabilizamos a la ministra de educación y al ministro de gobernación de vulnerar a las adolescentes al admitir públicamente que se les puede reprimir y violentar. Eso significa ¿que se vale atropellarlas y arrastrarlas de los cabellos como lo hizo un femicida la semana anterior? ¿Que se autoriza a la policía a seguir violentando el cuerpo y la dignidad de las mujeres?
Llamamos a la ciudadanía a pronunciarse por una educación pública con calidad humana, democrática y respetuosa en primer lugar de la dignidad y derechos las personas.
Exigimos que cese la violencia institucional contra las y los estudiantes normalistas.
LAS Y LOS ESTUDIANTES NO ESTAN CONTRA EL SISTEMA
EL SISTEMA ESTA CONTRA LAS Y LOS ESTUDIANTES
Estudiantes y Claustro Docente de la Maestría de Estudios de Género y Feminismos
de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales en Guatemala (FLACSO)
Asociación de Mujeres para Estudios Feministas
Comisión Universitaria de la Mujer de la Universidad de San Carlos de Guatemala
No hay comentarios:
Publicar un comentario