Si bien los detenidos portaban documentos, el comisario Gilberto Fleitas afirmó que “no siempre son verdaderos” y para ello reclamó verificar la identidad de los detenidos de 28 y 30 años con información a Interpol de Bolivia.
En su poder tenían “un arma de fuego de grueso calibre, un par de esposas, dos equipos de comunicación y estaban aguardando la entrega de dos motocicletas que sería lo último a conseguir” para realizar la operación planeada.
“Quisimos saber a quién iba a matar pero no hemos llegado a eso” aseguró el comisario.
Por su parte, los detenidos admitieron que intentaban matar a un político para enturbiar el proceso electoral de hoy, según informaron fuentes oficiales.
El ministro del Interior, Carmelo Caballero, sostuvo hoy que “existen suficientes indicios que apuntan a que los sicarios habrían querido matar a un político paraguayo”, aunque no se sabe el nombre.
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