El viernes por la noche, el procurador Carlos Zamarripa anunció la desarticulación de una banda del crimen organizado en Villagrán.
Entre los objetos asegurados hay machetes que algunos utilizaban para asesinar y desmembrar a sus víctimas; además de arsenales, drogas, vehículos y una casa de seguridad.
Los detenidos son Juan J. de 19 años, Humberto H. de 19 años, ambos provenientes de Michoacán; Juan A. de 19 años originario de Celaya; y de un adolescente de 17 años de edad.
Entre los hechos en que se les involucra, está el ataque con disparos de arma de fuego a las oficinas del Ministerio Público de Apaseo el Alto, ocurrido el pasado 14 de marzo, entre otros hechos delictuosos ocurridos recientemente en el estado.
Con la intervención de los grupos tácticos fue posible su arresto sin que se realizaran disparos, asegurando dos camionetas y un arsenal, siendo tres armas de fuego cortas y tres armas de fuego largas, además de 277 cartuchos útiles de diferentes calibres, cargadores, 10 kilógramos de marihuana, cinco chalecos tácticos, dos pasamontañas, rollos de cinta adhesiva, una torreta, ocho aparatos telefónicos y una computadora portátil.
Dando seguimiento a dichas indagatorias de los hechos delictivos que han azotado principalmente a la zona sur de la entidad y con el trabajo coordinado de la PGJE y la SSPE, se logró ubicar y capturar a Adrián H. alias “Paco y/o Titino” de 30 años de edad y Verónica F. de 29 años, ambos originarios de Morelia, Michoacán, quienes dijeron pertenecer al crimen organizado.
La Procuraduría General de Justicia cuenta con elementos que los señalan como probables autores de diversos homicidios y secuestros acontecidos a últimas fechas, entre ellos algunos casos en las que sus víctimas fueron asesinadas y desmembradas, para después ser abandonados los cuerpos con mensajes en cartulinas.
Con su detención, en Villagrán, se aseguró una vivienda que usaban como “casa de seguridad”, además de una camioneta de lujo de modelo reciente, la cual cuenta con reporte de robo; cuatro armas de fuego cortas y tres tipo largas (fusiles de asalto); así como 278 cartuchos útiles de varios calibres, seis chalecos balísticos y tres celulares, incluso machetes aún con restos de líquido hemático.
Los detenidos quedaron a disposición de la autoridad competente a fin de que se resuelva su situación jurídica.
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