Los activistas se congregan frente al Parlamento, mientras el gobierno ya desplegó miles de efectivos para evitar los disturbios como los de ayer. La ola de protestas surge como consecuencia de la necesidad de aprobación de un paquete de medidas de ajuste para recibir un crédito del Banco Europeo y el FMI y tratar de evitar la quiebra.
Por su parte, los sindicatos griegos llevan hoy a cabo su segundo día de huelga general de 48 horas contra las medidas exigidas por la “troika”.
El transporte urbano está paralizado: no funcionan ni los trenes, tranvías, autobuses, trolebuses ni gran parte del metro.
En el puerto, los barcos de mercancías como la mayoría de los transbordadores quedaron amarrados.
En cambio los vuelos no están afectados al no participar los controladores aéreos en el paro y los hospitales trabajan sólo de urgencia.
Miles de efectivos policiales fueron movilizados a Atenas para sofocar los disturbios y ya dejaron una decena de heridos y media docena de detenidos.
Al menos 25 diputados socialistas y una decena de conservadores, así como los 16 del derechista partido LAOS ya avisaron de que votarán en contra del paquete de medidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario