Fractura en gremios de Secundaria
Represión.
PABLO MELGAR
Tras cuatro días de paro en los liceos el sindicato de profesores (Fenapes) terminó fracturado y perdiendo afiliados. El gobierno respaldó a los jerarcas de la educación y confirmó que no dejará espacios para las ocupaciones y cortes de ruta.
Las cartas de desafiliación se amontonan en la sede del sindicato de Secundaria (Fenapes) y en particular de ADES Montevideo. La puja interna entre radicales y frenteamplistas llevó a que muchos docentes resolvieran darle la espalda al gremio tras cuatro días de paro y luego de una represión como no se veía "hace tiempo", según los dirigentes sindicales.
El Partido Comunista (PCU) volvió a jugar todas sus cartas en apoyo del gobierno y la Fenapes terminó realizando un acuerdo que en los hechos configurará la firma de "un acta notarial" sobre los desperfectos en la infraestructura de los liceos, según confirmaron fuentes del Codicen y de los sindicatos.
A partir de hoy un grupo de trabajo conformado por los sindicatos, técnicos de Codicen y Secundaria y representantes de los padres analizará la situación edilicia de cada uno de los liceos según acordaron ayer de palabra los gremios de Secundaria y el Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP).
Un arquitecto de Secundaria evaluará el tiempo que llevará la concreción de las obras y lo dejará por escrito en un documento que firmarán todos los integrantes de la comisión, según se acordó ayer.
La primera aplicación de este protocolo se realizará a partir de hoy en el liceo 70 del Cerro que fue ocupado el miércoles por padres de alumnos y profesores. Los docentes del lugar esperan que a las 16 de hoy el director general de Secundaria, Juan Pedro Tinetto, se acerque al lugar para comenzar a trabajar en el acuerdo.
Lo otro que consiguieron los sindicatos de Secundaria es que el Codicen concediera una malla metálica para separar la zona que fue clausurada por la Inspección de Trabajo del resto de las instalaciones del liceo 45.
En horas de la tarde de ayer, el presidente José Mujica recibió al titular del Codicen, José Seoane, y al director general de Secundaria, Juan Pedro Tinetto, para trasladarles el apoyo a su gestión. En tal sentido, tanto Seoane como Tinetto confirmaron al salir de la reunión que analizaron con el primer mandatario planes y proyectos para mejorar el nivel de los aprendizajes en la educación pública.
A su vez el gobierno salió a defender la represión a los padres y docentes del liceo 70 que pretendieron cortar la ruta 1 luego de desalojar pacíficamente el centro educativo. El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que la Policía ejecuta el decreto que impide las ocupaciones de lugares públicos.
El jefe de Policía de Montevideo, Diego Martínez, admitió en radio Sarandí que fue él quien supervisó el procedimiento. Además, declaró que ordenó el uso de balas de goma para evitar el contacto físico con los manifestantes y así disminuir los riesgos.
Los principales dirigentes de ADES Montevideo rechazaron la represión y reclamaron que los "responsables políticos" se hagan cargo de la medida. Varias filiales de Fenapes se solidarizaron con los padres y docentes del liceo 70.
Pablo De León, uno de los militantes que terminó preso tras la refriega, aseguró a El País que fue detenido porque se acercó a pedir a los policías que dejaran de "pegarle patadas en la cabeza a un amigo que estaba caído en el piso".
De León, un funcionario de los talleres de Secundaria de 23 años, aseguró que el "mismo milico que le pegaba a mi amigo me agarró del brazo y me pegó; en la camioneta y esposado, me pisaron la cabeza, tengo un chichón en la cara por eso", narró el activista.
Por otro lado, dijo que junto a él fue detenido un menor de 16 años que declaró que al subir al patrullero un policía le puso un revólver en la cabeza para que dijera que había estado tirando piedras, según afirmó De León a El País.
En tanto, en la mañana de ayer hubo tensión entre los integrantes de ADES Montevideo y el resto de los sindicalistas en la sede del Pit-Cnt y frente a las autoridades del Codicen y la Universidad de la República.
Tras una noche destinada a recorrer varias comisarías para localizar a sus compañeros presos, en la mañana del jueves una delegación de ADES se instaló en la entrada de la sede del Pit-Cnt para escrachar al presidente del Codicen, José Seoane, que sería uno de los panelistas.
El jerarca participó de la presentación de la comisión de Educación de la central obrera. Instalaron un parlante en la puerta de la central en el que se repetían continuamente los reclamos del sindicato de los profesores de Montevideo.
Los docentes estaban enojados porque el Pit-Cnt no convocó a los gremios de la enseñanza para organizar la comisión de educación. A eso se sumó la represión vivida durante la noche anterior.
Los militantes eran los mismos, aunque faltaban los padres del 70 y los delegados de otros gremios que participaron en la movilización del liceo.
Cuando Seoane tomó la palabra unos 20 representantes de ADES ingresaron al salón de actos del Pit-Cnt portando afiches con fotografías de los liceos con problemas edilicios. Se mantuvieron en silencio escuchando el largo discurso que pronunció el presidente del Codicen.
Cuando finalizó el jerarca la platea no aplaudió excepto dos jóvenes que estaban dentro del público. Ambos se pararon, dieron la espalda a la mesa en que estaba Seoane y aplaudieron a los representantes de ADES.
Tras el discurso se retiraron para armar el escrache que tendría lugar cuando saliera Seoane. En eso llegó un mensaje de texto de los padres del liceo 70 que avisaba sobre la presencia de policías en el lugar que hasta la noche anterior habían ocupado. Tomaron sus cosas y se fueron al liceo del Cerro.
Cuando llegaron el liceo estaba cerrado y rodeado de una guardia policial que incluía varios vehículos antimotines.
Horas antes el director general de Secundaria, Juan Pedro Tinetto, había ordenado a la directora del centro educativo, Grisel Álvarez, que por razones de seguridad cerrara el lugar y permaneciera a las órdenes.
Según Tinetto no había condiciones para abrir el liceo. Afuera del establecimiento un grupo de padres pretendía ingresar para realizar una asamblea y evaluar los hechos de la noche anterior. Al rato varios inspectores de Secundaria llegaron al lugar y pidieron a los policías que se retiraran porque no era necesario quedarse allí.
El presidente de Fenapes, Manuel Oroño, dijo que los liceos 45, 48, 70, 71 y 72 de Montevideo, el 8 de Rivera, 2 de Maldonado y el de Punta del Este seguirán sin clases por temas edilicios o "de papelerío".
El País Digital
Represión.
PABLO MELGAR
Tras cuatro días de paro en los liceos el sindicato de profesores (Fenapes) terminó fracturado y perdiendo afiliados. El gobierno respaldó a los jerarcas de la educación y confirmó que no dejará espacios para las ocupaciones y cortes de ruta.
Las cartas de desafiliación se amontonan en la sede del sindicato de Secundaria (Fenapes) y en particular de ADES Montevideo. La puja interna entre radicales y frenteamplistas llevó a que muchos docentes resolvieran darle la espalda al gremio tras cuatro días de paro y luego de una represión como no se veía "hace tiempo", según los dirigentes sindicales.
El Partido Comunista (PCU) volvió a jugar todas sus cartas en apoyo del gobierno y la Fenapes terminó realizando un acuerdo que en los hechos configurará la firma de "un acta notarial" sobre los desperfectos en la infraestructura de los liceos, según confirmaron fuentes del Codicen y de los sindicatos.
A partir de hoy un grupo de trabajo conformado por los sindicatos, técnicos de Codicen y Secundaria y representantes de los padres analizará la situación edilicia de cada uno de los liceos según acordaron ayer de palabra los gremios de Secundaria y el Consejo Directivo Central (Codicen) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP).
Un arquitecto de Secundaria evaluará el tiempo que llevará la concreción de las obras y lo dejará por escrito en un documento que firmarán todos los integrantes de la comisión, según se acordó ayer.
La primera aplicación de este protocolo se realizará a partir de hoy en el liceo 70 del Cerro que fue ocupado el miércoles por padres de alumnos y profesores. Los docentes del lugar esperan que a las 16 de hoy el director general de Secundaria, Juan Pedro Tinetto, se acerque al lugar para comenzar a trabajar en el acuerdo.
Lo otro que consiguieron los sindicatos de Secundaria es que el Codicen concediera una malla metálica para separar la zona que fue clausurada por la Inspección de Trabajo del resto de las instalaciones del liceo 45.
En horas de la tarde de ayer, el presidente José Mujica recibió al titular del Codicen, José Seoane, y al director general de Secundaria, Juan Pedro Tinetto, para trasladarles el apoyo a su gestión. En tal sentido, tanto Seoane como Tinetto confirmaron al salir de la reunión que analizaron con el primer mandatario planes y proyectos para mejorar el nivel de los aprendizajes en la educación pública.
A su vez el gobierno salió a defender la represión a los padres y docentes del liceo 70 que pretendieron cortar la ruta 1 luego de desalojar pacíficamente el centro educativo. El ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo que la Policía ejecuta el decreto que impide las ocupaciones de lugares públicos.
El jefe de Policía de Montevideo, Diego Martínez, admitió en radio Sarandí que fue él quien supervisó el procedimiento. Además, declaró que ordenó el uso de balas de goma para evitar el contacto físico con los manifestantes y así disminuir los riesgos.
Los principales dirigentes de ADES Montevideo rechazaron la represión y reclamaron que los "responsables políticos" se hagan cargo de la medida. Varias filiales de Fenapes se solidarizaron con los padres y docentes del liceo 70.
Pablo De León, uno de los militantes que terminó preso tras la refriega, aseguró a El País que fue detenido porque se acercó a pedir a los policías que dejaran de "pegarle patadas en la cabeza a un amigo que estaba caído en el piso".
De León, un funcionario de los talleres de Secundaria de 23 años, aseguró que el "mismo milico que le pegaba a mi amigo me agarró del brazo y me pegó; en la camioneta y esposado, me pisaron la cabeza, tengo un chichón en la cara por eso", narró el activista.
Por otro lado, dijo que junto a él fue detenido un menor de 16 años que declaró que al subir al patrullero un policía le puso un revólver en la cabeza para que dijera que había estado tirando piedras, según afirmó De León a El País.
En tanto, en la mañana de ayer hubo tensión entre los integrantes de ADES Montevideo y el resto de los sindicalistas en la sede del Pit-Cnt y frente a las autoridades del Codicen y la Universidad de la República.
Tras una noche destinada a recorrer varias comisarías para localizar a sus compañeros presos, en la mañana del jueves una delegación de ADES se instaló en la entrada de la sede del Pit-Cnt para escrachar al presidente del Codicen, José Seoane, que sería uno de los panelistas.
El jerarca participó de la presentación de la comisión de Educación de la central obrera. Instalaron un parlante en la puerta de la central en el que se repetían continuamente los reclamos del sindicato de los profesores de Montevideo.
Los docentes estaban enojados porque el Pit-Cnt no convocó a los gremios de la enseñanza para organizar la comisión de educación. A eso se sumó la represión vivida durante la noche anterior.
Los militantes eran los mismos, aunque faltaban los padres del 70 y los delegados de otros gremios que participaron en la movilización del liceo.
Cuando Seoane tomó la palabra unos 20 representantes de ADES ingresaron al salón de actos del Pit-Cnt portando afiches con fotografías de los liceos con problemas edilicios. Se mantuvieron en silencio escuchando el largo discurso que pronunció el presidente del Codicen.
Cuando finalizó el jerarca la platea no aplaudió excepto dos jóvenes que estaban dentro del público. Ambos se pararon, dieron la espalda a la mesa en que estaba Seoane y aplaudieron a los representantes de ADES.
Tras el discurso se retiraron para armar el escrache que tendría lugar cuando saliera Seoane. En eso llegó un mensaje de texto de los padres del liceo 70 que avisaba sobre la presencia de policías en el lugar que hasta la noche anterior habían ocupado. Tomaron sus cosas y se fueron al liceo del Cerro.
Cuando llegaron el liceo estaba cerrado y rodeado de una guardia policial que incluía varios vehículos antimotines.
Horas antes el director general de Secundaria, Juan Pedro Tinetto, había ordenado a la directora del centro educativo, Grisel Álvarez, que por razones de seguridad cerrara el lugar y permaneciera a las órdenes.
Según Tinetto no había condiciones para abrir el liceo. Afuera del establecimiento un grupo de padres pretendía ingresar para realizar una asamblea y evaluar los hechos de la noche anterior. Al rato varios inspectores de Secundaria llegaron al lugar y pidieron a los policías que se retiraran porque no era necesario quedarse allí.
El presidente de Fenapes, Manuel Oroño, dijo que los liceos 45, 48, 70, 71 y 72 de Montevideo, el 8 de Rivera, 2 de Maldonado y el de Punta del Este seguirán sin clases por temas edilicios o "de papelerío".
El País Digital
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