En un mes, al menos 100 mil personas ya han firmado a favor de la independencia, que surge como respuesta a la victoria de Obama en las últimas elecciones presidenciales.
Gran parte del sur de EEUU, concentra a los estados más conservadores como Alabama, Colorado, Arkansas, Florida, Mississippi, Missouri o Lusiana, los cuales tampoco están contentos con la reelección de Obama.
La administración del presidente ahora tiene la obligación de responder al pedido de independencia, pues se ha sobrepasado con creces las 25 mil firmas necesarias ara ello. Naturalmente la respuesta de Obama será un rotundo “no”.
No es la primera vez que Texas pide la independencia, pues el tema fue impulsado por el gobernador Rick Perry en 2009. “El Gobierno federal está estrangulando a los estadounidenses con los impuestos, el gasto y la deuda”, dijo Perry en ese entonces y sugirió que los tejanos podrían en algún momento “cansarse tanto que querrían separarse de la unión”.
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