Paraguay amaneció en el primero de tres días de duelo
Asunción, 16 jun (PL)
Los sucesos, que provocaron alta tensión en todo el país durante este viernes, se registraron en Curuguaty, a 240 kilómetros de esta capital, y una actualizada cifra de víctimas señaló ahora la muerte de seis policías y 10 campesinos, además de unos 80 heridos.
El impacto político-social provocó la destitución del ministro del Interior, Carlos Filizzola, y el comandante general de la Policía, Paulino Rojas, por lo cual el país conocerá en el curso de este día los nombres de quienes les sustituirán en sus altos cargos.
Entre las víctimas fatales reportadas, se encuentran los principales jefes del Grupo de Operaciones Especiales de la Policía en la zona, así como algunos de los dirigentes del grupo campesino ocupante de los terrenos.
La hacienda pertenece al exsenador del tradicional Partido Colorado Blas Riquelme, acusado por los campesinos de acaparar decenas de miles de hectáreas pertenecientes al Estado y conseguidas en forma irregular durante gobiernos anteriores.
Sin embargo, Riquelme fue favorecido por una orden judicial que encargó a la policía desalojar de sus predios a los campesinos ocupantes, generándose la violencia al comenzar esa operación.
La dureza del enfrentamiento obligó al presidente de la Republica, Fernando Lugo, a ordenar la intervención de efectivos del Ejército en apoyo a las fuerzas policíacas para restaurar el control de la zona.
Mientras el Gobierno anunció una amplia investigación de los hechos, dirigentes de organizaciones campesinas y el Partido Comunista Paraguayo demandaron terminar con los latifundios y resolver el tema de la tenencia de la tierra como solución para evitar la violencia.
Asunción, 16 jun (PL)
Los sucesos, que provocaron alta tensión en todo el país durante este viernes, se registraron en Curuguaty, a 240 kilómetros de esta capital, y una actualizada cifra de víctimas señaló ahora la muerte de seis policías y 10 campesinos, además de unos 80 heridos.
El impacto político-social provocó la destitución del ministro del Interior, Carlos Filizzola, y el comandante general de la Policía, Paulino Rojas, por lo cual el país conocerá en el curso de este día los nombres de quienes les sustituirán en sus altos cargos.
Entre las víctimas fatales reportadas, se encuentran los principales jefes del Grupo de Operaciones Especiales de la Policía en la zona, así como algunos de los dirigentes del grupo campesino ocupante de los terrenos.
La hacienda pertenece al exsenador del tradicional Partido Colorado Blas Riquelme, acusado por los campesinos de acaparar decenas de miles de hectáreas pertenecientes al Estado y conseguidas en forma irregular durante gobiernos anteriores.
Sin embargo, Riquelme fue favorecido por una orden judicial que encargó a la policía desalojar de sus predios a los campesinos ocupantes, generándose la violencia al comenzar esa operación.
La dureza del enfrentamiento obligó al presidente de la Republica, Fernando Lugo, a ordenar la intervención de efectivos del Ejército en apoyo a las fuerzas policíacas para restaurar el control de la zona.
Mientras el Gobierno anunció una amplia investigación de los hechos, dirigentes de organizaciones campesinas y el Partido Comunista Paraguayo demandaron terminar con los latifundios y resolver el tema de la tenencia de la tierra como solución para evitar la violencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario